miércoles, 13 de abril de 2011

13 de abril de 2011

Una fantasía que me aborda desde hace varios meses es tener algún tipo de súper poder, o ser una diosa encarnizada devorando a cuanto ojete criminal me encuentre en el camino, como lo hizo….al devorar a sus hijos. A veces, cuando leo los diarios y me encuentro esas historias de emigrantes, narcos, secuestrados, violaciones y un largo y casi interminable etcétera, me doy cuenta que prefiero una película gore a seguir leyendo tanta saña, tanto violencia sin sentido, me siento rebasada, mi intelecto no alcanza entender y mis entrañas se comprimen, no quiero seguir leyendo, pero tampoco me puedo darme la vuelta para fingir que no pasa nada o que eso es algo que completamente ajeno a mí.

Tantas preguntas, tantas reflexiones o interpretaciones de lo que está viviendo este país se quedan sólo en eso: reflexiones ¿y las acciones? ¿Qué puedo hacer con toda esa información? ¿Si justo en este momento en la frontera de Guatemala- México un grupo de pedazos de mierda están extorsionando a la gente más jodida que sale de su país para ganarse un varo, si en el norte casi niños están matando por deporte? Alguien cercano me dice: hagamos patria matemos a un narco ¿yo matar? Ojo por ojo, diente por diente y el mundo estará lleno de ciegos y chimuelos, pero también recuerdo la frase “Si quieres paz comienza la guerra” ¿qué puedo hacer? ¿Cómo hacerlo? No tengo ni puta idea, me enojo de la historia de este país manchada de sangre, corrupción, injusticia. Si de algo alguien quisiera morirse lo puede hacer de coraje y rabia al revisar que ninguna historia, absolutamente ninguna tiene un final feliz.